Querida familia de Siembra NC,
Les escribo con la emocionante noticia de que hace seis semanas tomé las riendas de Siembra NC como nueva Directora Ejecutiva. Aunque no soy nueva para el equipo, quería tomar esta oportunidad para compartir un poco de mi historia y el camino que quiero forjar para el futuro de Siembra.
Carolina del Norte ha sido mi hogar desde que llegué a EE.UU. de Nicaragua hace quince años. Como una mujer latina queer de clase trabajadora y con una familia de estatus migratorios mezclados, aprender a organizar fue de suma importancia para que podamos sobrevivir. Esto se hizo claro para mi en el 2010 cuando los republicanos en la Asamblea General de Carolina del Norte y del Congreso de EE.UU. nos convirtieron en objetivo de sus ataques y empezamos este periodo oscuro de criminalización de las comunidades Latinx e inmigrantes. Por esto, me involucré en actividades de abogacía y en coaliciones, para eliminar las condiciones difíciles sobre las cuales mis seres queridos y yo vivíamos.
En esa entonces, "abogacía" significaba contar nuestras historias para apelar a la empatía de legisladores republicanos -- las personas que pasaban leyes anti-inmigrantes como la HB 318. No les importaban nuestras historias. En un punto me quedó claro que para que ellos les empezara a importar lo que nos pasaba, la manera que percibían nuestro poder tendría que cambiar. Luego de años de hacer lobbying y participar en protestas, la lección más grande que aprendí es que para ganar necesitamos poder.
El poder viene de los barrios, de los trabajadores en sus trabajos, de crear nuestras propias soluciones en vez de rogarle a otras personas que nos tengan simpatía. El verdadero poder viene de encontrar suficiente gente para hacer que los que toman las decisiones que nos dañan se hagan responsables por su daños.
Y entonces, ¿Cómo hacemos eso? ¿Cómo construimos el poder que logre esto? La respuesta es: Organizando. Está claro que si no nos dedicamos a organizar de manera profunda tanto que logremos cambiar nuestra realidad política, no importará cuanta gente registremos y saquemos a votar, se seguirán aprovechando de nuestra gente. Si logramos cambiar nuestra realidad política, podremos poner fin a la criminalización, robo de salario, condiciones de trabajo inseguras, discriminación en las escuelas y hasta eliminar a los renteros que prefieren el dinero por encima de las personas. Construir esta nueva realidad política es lo que guía el camino de Siembra NC de aquí en adelante.
Mi compromiso para nuestra familia de Siembra NC y nuestrxs miembrxs es de co-liderar el proceso para crear la Carolina del Norte que los latinx de clase trabajadora quieren, barrio por barrio, trabajo por trabajo hasta que los que quieren mantenernos abajo no tengan más opción que hacer lo que es mejor para nuestras comunidades.
Me siento honrada de liderar el equipo que hubiese querido tener a mi lado de más joven para encontrar el poder que vive en mi. Hacemos esto para que ninguno de nosotrxs tenga que estar solo, para tener un hogar político que nos sepa ver, querer y dónde podamos construir el Carolina del Norte que nuestras comunidades se merecen.
En la lucha,
Kelly Morales